Toni Kroos, recién cumplidos los 34 años el 4 de enero, es un tipo peculiar, alguien con las ideas claras en el vestuario del Real Madrid, al que llegó en julio del 2014 y que se ha convertido en uno de sus iconos y jugadores más queridos. Kroos mantuvo en todo momento su oposición a jugar en Arabia por entender que es un país que no respeta los derechos humanos y al que solo se va por dinero. En una grada mayoritariamente a favor del Madrid, el jugador fue silbado cada vez que tocaba el balón tanto contra el Atlético como contra el Barcelona. Acabada la final, Kroos fue el único jugador que se negó a posar con la camiseta conmemorativa en la que se había estampado el número trece correspondiente a las supercopas de España ganadas por los blancos.