Mallorca y Real Sociedad dejaron el desenlace de su semifinal para Anoeta después de un partido en Son Moix bastante equilibrado, con pocas ocasiones y que terminó sin goles. El equipo de Imanol Alguacil, sin el lesionado Oyarzabal, comenzó dominando el balón pero en cuanto llegaba a las inmediaciones del área rival, le faltaban ideas para hacer daño a los de Javier Aguirre.