Cuatro años después de su primera puesta en escena, cuando le había complicado la vida a Rafael Nadal en Roland Garros, Jannik Sinner (22) es definitivamente una realidad, el tenista más afilado del momento.
Cuatro años después de su primera puesta en escena, cuando le había complicado la vida a Rafael Nadal en Roland Garros, Jannik Sinner (22) es definitivamente una realidad, el tenista más afilado del momento.