Tener razón en esto del futbol y en la historia de España viene de lejos. Desde el “mandé a mis barcos a luchar contra los hombres, no contra los elementos” de Felipe II y su Armada invencible al “más vale honra sin barcos que barcos sin honra” de Méndez Núñez. Frases quijotescas que, visto lo visto, vuelven a formar parte del ADN del FC Barcelona, olvidado ya Johan Cruyff, entre cuyos méritos figuró desterrar la madriditis y la cultura de la queja (pese a las razones).