Después de ver la película de Scarlett Johansson La otra cara de la luna , uno se queda con la duda más que razonable de si los astronautas del Apollo 11 realmente pisaron la superficie del satélite de la Tierra y depositaron en ella la bandera de las barras y estrellas, o si todo fue un montaje rodado en un estudio de televisión. En cualquier caso, apunta a que esa trampa habría sido posible. Estos días, más de uno ha resaltado la casualidad de que el millonario Mike Lynch y un ex socio con el que había sido juzgado por fraude (y declarados ambos inocentes) muriesen en sendos accidentes, uno al hundirse su yate y otro atropellado, en cuestión de cuarenta y ocho horas.