Antológico. Majestuoso. Uno contra todos. Y ese hombre solo rinde y derrota a los demás. El pelotón se postra. Un individuo puede con el colectivo, con cualquier alianza, con la fuerza de las masas. El ciclista más vigilado se escapa de la vigilancia. Todos estaban pendientes de él, del dorsal 22, y nadie pudo creer lo que estaba viendo con sus ojos ni mucho menos estar a su lado. El más temido abona los temores, para nada infundados, creando el pánico con cada uno de sus ataques. Si quereis, venid a por mí. Si podéis, seguidme. Y nadie pudo acercarse. El maillot arco iris tenía dueño.