No hay nada más barcelonista que un rondo. Las jugadoras los realizan en todos los entrenamientos. Pero las futbolistas del Barcelona se dieron el lujo de plasmar su estilo combinativo en tres golazos en la Champions. En Viena desarbolaron de nuevo al St. Pölten austríaco a base de pases rápidos, cortos y precisos. Las defensas locales no entendían cómo la pelota podía circular a esa velocidad en una zona donde a priori no parecía haber espacio.