La Champions retoca hasta su fantástico himno, aunque en este caso sea de forma mínima y para introducir más trompetas. Pero baste el apunte instrumental para dar fe del cambio de pelaje de una competición que ha decidido reformularse ante la amenaza latente de la Superliga. Un formato movido de arriba a abajo, un sorteo dirigido por ordenador y bastante complicado de seguir y una serie de vídeos en los que no faltó la ironía y un mensaje hacia los que quieran salirse del mundo UEFA para crear sus propias competiciones. “Esto es como una Superl…”, dijo Zlatan Ibrahimovic en uno de estos vídeos. “Shst! Eso nunca va a pasar”, le contestaba el presidente de la UEFA, Aleksander Ceferin, entre el sarcasmo y la mofa. No se sabe si en el futuro la élite del fútbol continental separará sus caminos del organismo que lo viene rigiendo pero sí que la Champions, una competición de éxito, de eso no hay duda, se ha visto obligada a entrar en una nueva era. Una época con más partidos, con más premios y con una clasificación única de 36 equipos. Habrá que ver cómo funciona pero a vuelapluma tiene muy buena pinta. Solo pensar que la última jornada será en horario unificado, con un total de 18 encuentros, hace que los amantes de las emociones fuertes se froten las manos.

Seguir leyendo…